No te mereces que te diga gracias, porque es una palabra muy pequeña. No te mereces que te abrace, porque mis brazos no son los dueños de todo el cariño del mundo. No te mereces que te quiera, porque mi corazón no tiene capacidad infinita. No te mereces que sea tu amiga, porque en mí no cabe una eternidad de felicidad.
Te mereces una constelación que dibuje agradecimientos cada noche. Te mereces un universo lleno de cariño. Te mereces el título de dueña de un universo lleno de amor. Te mereces la primera sonrisa de un niño resonando cuando más lo necesites.
Cogería en brazos a la muerte y me tiraría junto a ella al vacío para que no tuvieras ningún miedo. Fabricaría sonrisas a tu alrededor para que no sufrieras.
Menos mal que el mundo no es perfecto porque, si lo fuera, deberías poseer toda la felicidad que en él existiría, sin dejar nada a los demás.
De alguien imperfecto, palabras imperfectas.
Te quiero

